La Policía Nacional ha desarticulado un grupo criminal especializado en el robo de vehículos y su despiece para reparar otros turismos y venderlos. Los arrestados despiezaban los vehículos sustraídos para reparar otros turismos siniestrados que luego vendían a compradores, sin que éstos lo supieran. Además, estafaban a aseguradoras simulando falsos robos para cobrar la indemnización, lo que generaba para las entidades pérdidas millonarias cada año.
De momento, los agentes de la Policía Nacional han esclarecido tres hechos delictivos relacionados con la sustracción de tres vehículos en los años 2019 y 2020 en la Comunidad de Madrid. A los arrestados se les imputan los presuntos delitos de receptación, estafa y simulación de delito.
Las inspecciones rutinarias que realizan en los desguaces para obtener información sobre vehículos siniestrados fueron el germen de la investigación. Los investigadores obtuvieron datos de diferentes vehículos que, según pudieron constatar tras varias gestiones policiales, habían sido reparados y se encontraban circulando, detalla la Policía. Una vez confirmadas las sospechas de los agentes de que habían sido reparados con piezas robadas, y tras observar que se encontraban a la venta en diferentes portales de Internet, identificaron a los implicados y detuvieron a tres personas.
Intercambio de información
La información facilitada por un concesionario oficial situado en Madrid permitió a las autoridades policiales españolas conocer que la pieza de un vehículo sustraído había sido instalada en otro vehículo no sustraído. Una vez inspeccionado el vehículo, los agentes comprobaron que llevaba piezas procedentes de dos vehículos de la misma marca y modelo que habían sustraídos en la Comunidad de Madrid en los años 2019 y 2020.
En relación con todo ese contexto, uno de los aspectos sobre los que la Policía llama la atención es el proyecto Invex de Interpol, iniciativa en la que colaboran varios fabricantes de automóviles y todos sus países miembros para establecer procedimientos que ayuden a detectar vehículos robados y a mejorar el intercambio de información relativa a este tipo delictivo. “De esta forma, se hace efectiva la colaboración entre las autoridades de los distintos países cuando alguna de ellas detecta una pieza o componente de un vehículo que tiene trazabilidad”, añade.
Fuente: Aseguranza