El Gobierno ha impulsado un “mecanismo de protección complementario” como medida extraordinaria ante la escalada de siniestralidad de los seguros agrarios combinados y “garantizar la estabilidad del sistema“. Ayer se mantuvo una reunión de la comisión general de la Entidad Estatal de Seguros Agrarios (Enesa), con presencia de la DGSFP y del Consorcio de Compensación de Seguros (CCS), donde se ha conocido el nuevo mecanismo que tendrá que ser aprobado por el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, departamento competente en esta materia.
Según la nota explicativa del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación esta medida “evitará un incremento en los costes de las pólizas que podría ascender a un total de 27 millones de euros anuales“. De manera práctica, a falta de conocer los detalles, la medida adoptada complementará, mediante una segunda capa de protección, el actual esquema del reaseguro. Así, el CCS asumirá “una mayor siniestralidad mientras los niveles de reserva permanezcan en niveles bajos“. Este objetivo, recalca el Ejecutivo “logrará dar estabilidad al sistema sin que repercuta en el coste final del seguro”, asegura.
Indica el Ejecutivo que el seguro agrario cuenta con un “instrumento fundamental para garantizar su viabilidad” y es el reaseguro del CCS y de las entidades aseguradoras “cuya finalidad es cubrir las indemnizaciones derivadas de los excesos de siniestralidad que puedan producirse en un año determinado”.
Justifica el Gobierno la medida en que las situaciones de climatologías adversad debidas al cambio climático “ha generado un importante incremento de la siniestralidad”. Así, en la historia del seguro agrario los cuatro ejercicios de mayor siniestralidad corresponden a 2012, 2017, 2018 y 2021; en cada uno de estos años el seguro ha indemnizado por valor de más de 700 millones.
Esta situación ha provocado que la “reserva de las entidades no haya podido dotarse de manera adecuada, ya que todo o parte del recargo de seguridad cobrado en póliza y que se destina a la reserva ha debido utilizarse para el pago de indemnizaciones en cada año”. Explica el ministerio que dotar de manera adecuada la reserva a través del recargo de la prima “implicaría implicaría un incremento del coste de las primas del seguro” valorado en los 27 euros mencionados.
2021, cifras récord
En la reunión también se han dado los datos oficiales de la contratación de seguros agrarios y siniestralidad del pasado año. La producción agrícola asegurada mantuvo cifras similares a 2020, aunque refleja un aumento del 9% respecto a la media del periodo 2017-2020. El capital asegurado alcanzó la cifra récord de 15.620 millones de euros, un 2% más que el año anterior. Por su parte, la siniestralidad creció un 22% y se abonaron más de 722 millones de euros en indemnizaciones.
El presupuesto aprobado para la subvención de estos seguros se incrementó en un 20% en 2021 y ascendió hasta los 253,7 millones. Las subvenciones finales abonadas a los agricultores fueron de 266 millones, el 32% del coste total de las pólizas recaudadas. Si se suman las ayudas de las comunidades autónomas (casi 100 millones), el porcentaje medio de subvención pública se eleva hasta el 44%.
Fuente: Aseguranza