Diez meses después de la implantación de la reforma laboral, las empresas hacen balance.
Diez meses después de la implantación de la reforma laboral, las empresas ya están en disposición de hacer un primer balance de resultados. En el informe presentado por InfoJobs, Reforma laboral: un año de camino, más de la mitad de las empresas (54 %) valoran negativamente las consecuencias que ha traído esta reforma en el mercado de trabajo.
El cambio de orientación ha sido notorio. A través de la reforma laboral se prioriza la contratación indefinida fija-discontinua frente a los contratos temporales. Y esto ha marcado a los actores que operan en el mercado. Veamos cómo.
El contrato indefinido: así ha afectado a las empresas
Una de las medidas más importantes que se recogen en la reforma laboral tiene que ver con el fomento de la contratación indefinida frente a la contratación temporal. Las empresas siempre se han manifestado a favor de una mayor flexibilidad en la contratación para generar empleo. Y aunque el aumento de la contratación fija es una estupenda noticia para nuestro mercado laboral, las empresas son claras a la hora de manifestarse acerca de esta cuestión.
La desaparición del contrato de obra y servicio y el fomento del contrato indefinido y del fijo-discontinuo ha tenido un impacto considerable. Tanto es así que dos tercios de las empresas dicen sentirse afectadas (65 %) y lo acusan más las empresas de menos de 50 trabajadores (68 %).
Otra cuestión que detallan las empresas y que ha tenido una repercusión importante en su funcionamiento es la limitación del nuevo contrato eventual por circunstancias de la producción. La mitad de las empresas se han visto afectado por esta novedad (54 %). Hay, sin embargo, otras cuestiones que también han impactado a las organizaciones, especialmente las de más de 60 empleados, como los nuevos ERTE y mecanismos RED (54 %), el sistema sancionador (51 %) o la aplicación de convenio en las contratas y subcontratas (49 %).
Las empresas contratarán menos por el aumento de costes
La mayor parte de empresas (estamos hablando de más de la mitad) mantendrán sus previsiones de crecimiento en cuanto a contratación. Sin embargo, el 30 % de las empresas contratarán menos personal por el incremento de costes que supone aplicar el nuevo modelo de contratación. Las que menos dispuestas están a contratar son las organizaciones de menos de 50 trabajadores (36 %), mientras que las medianas y grandes (50 o más trabajadores) solo reducirán en un 22 % la incorporación de personal.
De lleno en la era del contrato definido: ¿objetivo conseguido?
El contrato indefinido era uno de los objetivos que perseguía el Gobierno con la aprobación de la nueva reforma laboral, para combatir la temporalidad. Ahora mismo, de hecho, el uso del contrato temporal es muy limitado y el denominado de obra y servicio ya no existe. El 76 % de las empresas están optando por contratar de manera indefinida, en lugar de emplear los contratos de obra y servicio y temporales. El 19 % afirman que externalizarán o subcontratarán algunos servicios y el 12 % se decantarán por el contrato de fijo-discontinuo. El 6 % sustituirán a los temporales por autónomos.
La mayor parte de contrataciones indefinidas se materializarán en el ámbito de los comerciales, informática y telecomunicaciones y especialistas del ámbito de la programación, la ingeniería y en hostelería, para camareros y cocineros. La externalización y subcontratación se reservará para gestión, producción, limpieza o transporte; mientras que los contratos fijos-discontinuos serán para operarios, profesores, mozos de almacén y conductores, profesiones mucho más ligadas a la temporalidad. Perfiles técnicos y programadores serán los que se contratarán, en mayor medida, como autónomos.
El hecho de tener que contratar a personas de manera indefinida también dará una vuelta a los perfiles más deseados. Está claro que las empresas no podrán permitirse arriesgar, de modo que buscarán personas con perfiles más cualificados (39 %) o con más experiencia (39 %), dejando un poco más de lado a los perfiles más jóvenes o con menos experiencia (25 %) o los menos cualificados (17 %).
Fuente: Infojobs