En la tercera jornada del congreso internacional ‘Los seguros agrarios en el actual contexto climático: situación y perspectivas’, Ignacio Machetti, presidente de Agroseguro, ha recordado las principales cifras del seguro agrario en 2023, marcadas por una siniestralidad histórica “que se podría situar en cerca de los 1.200 millones de euros al final del ejercicio, sin considerar gastos”. La grave sequía, los constantes frentes tormentosos y los daños por helada, unidos a los siniestros que sufre el ganado de manera continuada, han elevado las cifras de indemnización prevista “muy por encima de lo habitual, lo que da buena muestra de la utilidad de contar con una póliza de seguro agrario en años y contextos como el actual”.
En paralelo, la contratación de seguros también crece un 9% en 2023, con unas primas totales que se situarán en torno a los 930 millones de euros.
Machetti aseguró que, a pesar de la grave situación agraria, el sistema español de Seguros Agrarios Combinados cuenta con la solvencia necesaria. También puso especial énfasis en el apoyo de las Administraciones Públicas, tanto, y sobre todo, del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación como de las Comunidades Autónomas, que soportan “el 50% del coste del seguro, diez puntos porcentuales más que hace una década, mientras que el otro 50% del importe lo asumen los productores asegurados”.
Asimismo, recordó que “por cada euro que aportan los agricultores y ganaderos asegurados, el sistema español de seguros Agrarios les ha devuelto 1,30 euros”, una cifra que se eleva hasta los 1,91 euros en los últimos tres años, y que se sitúa en 2,36 euros en 2023.
De cara al futuro, ha destacado la importancia de seguir aplicando la “técnica actuarial” para llevar al equilibrio a las 45 líneas de seguro, fomentando la individualización de las condiciones de las pólizas para evitar medidas generalizadas, y centrando los ajustes más relevantes “en los asegurados de alta y reiterada siniestralidad”. Insistiendo, también en la necesidad de “anticipación y vigilancia constante de la evolución climática”, así como del trabajo conjunto de los diferentes actores del sistema para su sostenibilidad.
Fuente: INESE