“La exposición al riesgo del sector de los seguros de la Unión Europea aumentó. Lo hizo a medida que el brote del Covid-19 afectó fuertemente a la vida de todos los ciudadanos europeos. Sus perturbaciones se notan en todos los sectores financieros y actividades económicas”. EIOPA resume así su informe de riesgos sectoriales basado en los datos de Solvencia II del cuarto trimestre de 2019 y presentado ayer.
A pesar de que algunos de los indicadores utilizados en este documento no captan la evolución más reciente del mercado en el contexto del brote del Covid-19, en los niveles de riesgo asignados se ha considerado el deterioro previsto de los indicadores pertinentes que reflejan toda la información disponible en una perspectiva de futuro.
Los riesgos macroeconómicos y de mercado, en un nivel muy alto
Los indicadores de riesgos macroeconómicos y de mercado se deterioraron a 31 de marzo. Han pasado de un nivel alto a otro muy alto. “El entorno macroeconómico se ha visto fuertemente afectado por el bloqueo mundial. La estimación del PIB apunta a una fuerte caída para el primer trimestre de 2020. Los últimos pronósticos prevén una recesión mundial para 2020”, recuerda la autoridad supervisora.
Además, las previsiones de inflación se han revisado a la baja para los próximos cuatro trimestres. El apoyo a la política monetaria ha sido activado por todos los principales bancos centrales.
Por otro lado, los mercados financieros se han caracterizado por la venta de todas las clases de activos. El aumento de la volatilidad de los mercados de bonos y acciones ha sido la nota predominante. También el incremento de las primas de riesgo y la huida hacia un comportamiento de inversión de calidad en marzo de 2020. Así, el riesgo crediticio ha aumentado en todas las clases de activos. En particular se observa en los CDS de los bonos del Estado y en los bonos de empresas financieras y no financieras han aumentado considerablemente.
¿Problemas de liquidez?
Los riesgos de liquidez y de financiación, también se han elevado hasta un nivel alto. «Se ha debido a las posibles tensiones adicionales sobre la liquidez disponible de los aseguradores en el horizonte de mediano a largo plazo”, concreta EIOPA. Añade: “En el cuarto trimestre de 2019 los indicadores de liquidez se mantuvieron estables en términos generales. No obstante, se espera que algunos empeoren, debido a la posible disminución de primas y de nuevos negocios. También por el posible aumento de las reclamaciones y al nivel de falta de liquidez de algunos activos”.
Los riesgos de rentabilidad y solvencia suben a un nivel alto
Aunque en el cuarto trimestre de 2019 las posiciones de solvencia de las aseguradoras se mantuvieron relativamente estables, de cara al futuro EIOPA espera que los riesgos de rentabilidad y solvencia se deterioren, “dado el escenario de doble impacto que afecta negativamente a los aseguradores tanto en el lado de los activos como en el de los pasivos”. Así, estos riesgos se elevan a un nivel alto en el sector asegurador de la UE.
“Si bien en general se mantiene estable en el cuarto trimestre de 2019, se espera que en el futuro se produzcan efectos negativos por la reducción de los ingresos y el aumento de la siniestralidad”, apunta el informe presentado ayer.
Finalmente, las percepciones del mercado se mantienen a un nivel medio, “aunque se están deteriorando”, advierte la autoridad. Apunta, al respecto, que la industria aseguradora europea tuvo un rendimiento inferior al del mercado, “tanto en Vida como en No Vida, y la relación media entre el precio y las ganancias de los grupos de seguros de la muestra disminuyó desde la última evaluación”.
En todo caso, las calificaciones externas y las perspectivas de los ratings de las aseguradoras no muestran signos de deterioro a finales de marzo de 2020, aunque EIOPA anticipa la expectativa de que la calidad del crédito se deteriore.
Fuente: “Informe EIOPA” de Noticias de INESE