El teletrabajo ligado a la Covid-19 ha conducido a un aumento de la actividad de phishing y hacking. Se han llegado a ataques cibernéticos con reclamaciones superiores a los 10.000 millones de dólares. Las aseguradoras han comenzado ya a reaccionar a este entorno de mercado.
Según el análisis de Willis Towers Watson, la respuesta de las compañías se articula en varias medidas.:
- Se están introduciendo “nuevos y estrictos controles de suscripción” en respuesta a este creciente número de siniestros declarados. Asimismo, están considerando la posibilidad de adoptar medidas adicionales.
- La capacidad los ciberriesgos está empezando a reducirse “de forma clara”. Muchas aseguradoras han tomado la decisión de reducir ampliamente su capacidad máxima. Ha pasado de 25 a entre 10 y 15 millones de euros, como máximo.
- Las aseguradoras recurren cada vez más a la utilización de cuadros de coaseguros y al reaseguro facultativo. El objetivo es limitar y compartir el coste de los siniestros.
- Este entorno de mercado se traduce en incrementos medios de precios de entre el 20% y el 30% en esta línea de negocio para el último trimestre de 2020 y el primero de 2021.
Fuente: Füture